En muchos casos, los publicistas son mucho mas ambiciosos de lo que parece a simple vista, pero no nos referimos a la ambición de ganar dinero, sino a la ambición de lograr que sus anuncios sean lo mas llamativos posibles para lograr que las personas presten atención a su trabajo y este cause cierto efecto, ya sea, rechazo, concientizacion, o humor y ternura, en cualquiera de los casos, el objetivo es causar un efecto y lograr que el anuncio sea recordado. Algunas veces para lograr que las personas “registren” los anuncios se suele recurrir a un concepto denominado publicidad agresiva, que consiste en utilizar ciertos métodos que no solo sirven para llamar la atención, sino que en muchos casos también se busca generar todo tipo de polémicas, ya que de esa manera se lograra finalmente llamar la atención de todas formas. Para definir la publicidad agresiva, se suele describir el uso de algunos elementos que pueden ser poco comunes al estilo normal de la publicidad o bien, el uso de estrategias de publicidad llevadas un poco al extremo.
Cuando hablamos de publicidad agresiva, no estamos hablando del simple hecho de promoción de un producto, sino que conlleva un cierto agregado publicitario que hace que este producto se encuentre en una situación que puede ser muy llamativa, bizarra, extraña, etc., pero ante todo debe ser siempre lo mas impactante posible para poder causar ese efecto que se desea. Como casi todas las cosas de la vida en sociedad, la publicidad también evoluciona y seria muy extraño que no lo hiciera ya que las personas que trabajan en ella se denominan “creativos” y basan su trabajo y sus carreras en la creación de nuevos materiales y estrategias de diversas cualidades que ayuden a la promoción de todo tipo de productos y servicios, con las grandes dificultades que eso conlleva, sobre todo la gran saturación que tiene el mercado de la publicidad hoy en día.
Esos creativos, pueden llegar a encontrar opciones para la creación de nuevos anuncios que algunas veces pueden llegar a herir susceptibilidades o causar grandes controversias, pero de eso se trata la publicidad agresiva, que, aunque no se trata de agredir directamente a nadie, lo que se busca es enviar un mensaje claro y directo, que por supuesto muchas veces puede ser mal entendido o incluso perder su esencia debido a lo extremo de los métodos utilizados para llevarlo a cabo.m La publicidad agresiva no es un invento novedoso, de hecho podríamos decir que es una simple consecuencia de un marcado aumento en la competitividad del mercado publicitario de los últimos años.