La comunicación en el marketing, incluye las acciones que pretenden obtener beneficios económicos inmediatos, tales como la publicidad, la venta personal, promoción de ventas, etcétera. A su vez, la comunicación corporativa, incluye las acciones orientadas a crear valor imperceptible tales como la reputación, la notoriedad, a través de las relaciones con los medios, la protección, y la responsabilidad social empresaria, entre otras. Entonces, para que quede más claro, la comunicación en el marketing, y la comunicación corporativa, apuntan a un mismo público integrado básicamente por clientes y demás grupos de interés externos. Su diferencia no se explica por el destinatario, sino que más bien por sus objetivos.
Este tema realmente es muy interesante para los círculos académicos de todo el mundo, tanto sea empleado como una disciplina independiente como componente lógico del marketing dentro de los programas de negocios, es decir de la administración de empresas. Un gran número de investigadores, trabajan en este campo, por lo que no sorprende que los conocimientos de la comunicación en el marketing, hayan alcanzado un alto nivel, casi se podría decir científico. Si nos preguntamos la diferencia que existe entre a comunicación y el marketing, diremos que la publicidad es una de las posibilidades que tiene la empresa para comunicarse con el mercado y apoyar así sus objetivos de marketing, es decir que se trata de comunicación al servicio del marketing. Una de las características más sobresalientes de la comunicación organizativa, es que las diferentes formas de comunicación, permanecen dentro de la organización, y evidentemente no todas se encuentran dentro del área de gestión del departamento de marketing. Una de las funciones más importantes que tiene la comunicación en el marketing radica en la operación sobre productos o servicios ofrecidos a los clientes, la definición de estrategias de distribución y las decisiones de precios. Pero, también tendremos que decir que este departamento, tienen una rama de contacto con las actividades de la comunicación. La característica definitiva de esta forma de comunicación, es el contacto personal directo entre el vendedor y el futuro comprador, quien facilita la adaptación a las necesidades de cada cliente.
